Mercedes-Benz ha aprovechado el marco del Gran Premio de Fórmula 1 de Las Vegas para desvelar las primeras imágenes de la versión de producción de su próximo AMG GT de cuatro puertas. Este modelo, que en su segunda generación se transformará en un vehículo exclusivamente eléctrico, toma como base el radical prototipo AMG GT XX Concept, y a pesar del camuflaje, las similitudes son evidentes.
El diseño mantiene la silueta general del prototipo, aunque introduce cambios notables como unos grupos ópticos de mayor tamaño con la firma lumínica en forma de estrella y una calandra más estilizada. Estos rasgos, junto a la barra LED que unirá los faros delanteros, lo emparentan directamente con lanzamientos recientes como el nuevo CLA.
La zaga, con su suave caída del techo y pilotos redondos, se mantiene más fiel al concept car. Una de las grandes incógnitas es si heredará la ausencia de luna trasera, una solución ya vista en modelos como el Polestar 4 que permite incrementar la rigidez del chasis. De ser así, el retrovisor interior sería sustituido por una pantalla conectada a una cámara exterior.
En el corazón del nuevo AMG GT latirá un sistema de propulsión de altísimo rendimiento, muy similar al del prototipo. Estará compuesto por tres motores de flujo axial suministrados por YASA, capaces de generar una potencia combinada de 1.360 CV (1.000 kW). Esta configuración permite al prototipo alcanzar los 360 km/h, aunque es probable que la versión de producción tenga su velocidad máxima limitada electrónicamente.
La tecnología de motores de flujo axial destaca por ofrecer una mayor densidad de potencia en un formato más compacto y ligero que los motores eléctricos convencionales. El sistema cuenta con refrigeración por aceite para los tres propulsores y por agua para los dos inversores.
La batería es otro de sus puntos fuertes. Compuesta por 3.000 celdas cilíndricas, utiliza una química NCMA (níquel, cobalto, manganeso, aluminio) en el cátodo y un ánodo con silicio para maximizar la densidad energética, que alcanza los 300 Wh/kg. Gracias a su arquitectura de 800 voltios, el AMG GT promete una capacidad de carga sin precedentes, con picos de entre 850 y 900 kW en corriente continua. Esto le permitirá recuperar 400 km de autonomía WLTP en apenas 5 minutos, situándolo como uno de los eléctricos con la carga más rápida del mercado.
Para demostrar su capacidad, el AMG GT XX Concept batió recientemente múltiples récords, incluyendo el de recorrer 5.479 km en 24 horas y completar el equivalente a una vuelta al mundo en menos de ocho días en el circuito de Nardò.
Equipamiento
El vehículo se basa en una plataforma exclusivamente eléctrica con arquitectura de 800 voltios. Equipa un sistema de propulsión con tres motores de flujo axial (uno delantero y dos traseros) refrigerados por aceite, capaces de entregar 1.360 CV (1.000 kW). La batería está compuesta por 3.000 celdas cilíndricas con química NCMA y ánodo de silicio. A nivel de diseño, cuenta con grupos ópticos con firma lumínica en forma de estrella y una barra LED frontal. Se especula con la posibilidad de no incluir luna trasera, sustituyéndola por un sistema de cámara y pantalla.
A favor
- Potencia excepcional de hasta 1.360 CV (1.000 kW).
- Tecnología de carga ultrarrápida con picos de hasta 900 kW.
- Capacidad para recuperar 400 km de autonomía en solo 5 minutos.
- Uso de motores de flujo axial, más compactos y eficientes.
- Batería de alta densidad energética con química NCMA y silicio.
- Rendimiento probado con múltiples récords de resistencia.
En contra
- La posible ausencia de luna trasera podría no ser del agrado de todos los conductores.
- Es probable que la velocidad máxima esté limitada electrónicamente en el modelo de producción.
- El diseño final podría ser menos radical que el prototipo.
- Se anticipa un precio de venta muy elevado.
